Inglaterra, una de las principales potencias del fútbol mundial hasta 1950, había visto como en tan solo doce años, su caché se había reducido considerablemente. Tres participaciones, tres decepciones. Solo en una ocasión habían conseguido pasar de fase de grupos, tan solo para ser eliminados por una Uruguay infinitamente superior en 1954. En el Mundial de Chile de 1962, analizamos su andadura.
El pase al Mundial se había consumado al vencer a Portugal por dos dianas a cero en Londres. Dicho triunfo les daba el primer puesto de su grupo de clasificación, por delante de la ya mencionada selección portuguesa, y de Luxemburgo. Las buenas noticias no tenían recorrido en Inglaterra, ya que la selección británica quedaba encuadrada en un grupo realmente difícil.
Hungría y Argentina, primeros escollos
Bulgaria, cenicienta del grupo D, poco tenía que ver con los otros dos rivales de los ingleses. Hungría era una de las principales potencias del fútbol europeo a mediados de siglo XX. Había alcanzado las finales en 1938 y 1954 -cayendo derrotados ante Italia y Alemania Federal-, y contaba en su equipo con estrellas como Florian Albert o Lajos Tichy. Sin embargo, era un equipo en pleno declive, el cual se consumaría en 1970 tras no clasificarse para la Copa del Mundo.
El otro rival sería una Argentina, selección con menor nombre del que posee en pleno 2018, pero con un gen competitivo idéntico al de la actualidad. Para hacer frente a estas selecciones, el seleccionador Walter Winterbottom contó con figuras de la talla de Bobby Robson, Bobby Charlton o Jimmy Greaves. Como peculiaridad, fue la primera ocasión en que un jugador que jugaba fuera de las islas disputaba el Mundial con Inglaterra. Fue Gerry Hitchens, futbolista del Inter de Milán.
Un nuevo mal debut
Los ingleses solo habían conseguido ganar en su debut del Mundial en la edición de 1950. En las otras dos ocasiones, habían conseguido empatar, y en 1962, empeoraron aún mas la racha. El gol del húngaro Tichy ponía contra las cuerdas a Inglaterra, que igualaba el partido en la segunda parte por medio de Flowers. Un minuto después, Florian Albert hacía el 2-1 definitivo. Derrota y los ingleses necesitaban empezar a sumar con urgencia.
Hungría demostraba su superioridad venciendo a Inglaterra en el debut.
El partido ante Argentina significaba una final, ya en el segundo choque del torneo. Y los británicos respondieron. Flowers y Charlton ponían el 2-0 al intermedio, y en el minuto 67, Greaves sentenciaba el duelo. Sanfilippo haría el gol del honor argentino. Antes de la ultima jornada, Inglaterra era segunda con dos puntos, por detrás de Hungría -cuatro puntos- e igualada con Argentina.
A cuartos con decepción
El 6 de junio, Argentina y Hungría empataban a cero en Rancagua. Esto significaba, que con un empate ante la débil Bulgaria, Inglaterra estaría en cuartos de final por segunda vez en su historia. El primer puesto era ya inalcanzable, y los ingleses esperaban que Checoslovaquia venciera por tres goles a México, y así evitar a la campeona Brasil en la siguiente ronda.
El conjunto de Walter Winterbottom fue incapaz de pasar del empate a cero ante los búlgaros. El punto servía para meterse en cuartos, pero las noticias desde Viña del Mar eran pésimas. Checoslovaquia ni siquiera había podido ganar a México, cayendo derrotados por 1-3, y el rival inglés sería Brasil.
Se impone la lógica brasileña
Pocos eran los que se atrevían a pensar que Inglaterra estaría en semifinales. Amarildo, Vavá y Garrincha asustaban en una Brasil que había cambiado su tradicional 4-2-4 por el novedoso 4-3-3. ¿Buenas noticias? Solo una. Pelé sería baja para todo el mundial tras lesionarse en la segunda jornada ante Checoslovaquia. Sin embargo, el potencial de los brasileños continuaba siendo muy alto.
En Viña del Mar, Inglaterra plantó cara durante los primeros 45 minutos. Dio una buena imagen y consiguió igualar el tanto inicial de Garrincha por medio de Hitchens. Pero en la segunda mitad, Brasil hizo honor a su escalafón de campeón, y el partido terminaría con 3-1 con una nueva diana de Garrincha y el gol de Vavá, el primero en el torneo para él, aunque acabara con cuatro.
Brasil sumaría su segundo Mundial en 1962, superando la baja de Pelé.
Brasil acabaría repitiendo título, sumando dos consecutivos, gracias a eliminar en semifinales a Chile y en la final a Checoslovaquia. Chile 1962 está considerado como uno de los peores mundiales de la historia, disputándose en un país incapaz de organizar un evento de esta magnitud, y con una cantidad de goles muy baja. Por parte de Inglaterra, tristeza, no siendo conscientes de que en 1966 les esperaba una cita con la historia.
1 Trackback / Pingback