Sin comenzar el Mundial, José Mourinho ya empieza a cimentar su plantel para la temporada 2018/2019. Si en invierno, consiguió adelantarse a otros grandes en la contratación de Alexis Sánchez, ha ocurrido algo similar en estas últimas semanas hasta hacerse oficial la llegada de Fred procedente del Shakhtar Donetsk. Podemos decir que a pesar de no poder conquistar el título de Premier League desde hace 5 años, el Manchester United sigue siendo uno de los clubes más atractivos en el mundo futbolístico.
Frederico Rodrigues de Paula Santos, conocidos por todos simplemente como Fred, nació en Belo Horizonte y la red de ojeadores del conjunto ucraniano -muy importante en Brasil-, lo incorporó tras buenas actuaciones en el SC Internacional. Tras 5 temporadas ha sido vendido por un montante que ronda los 60 millones de euros a la entidad mancuniana. Se repite una operación clásica del club. Con él, suman unos beneficios netos de 178M€ en la venta de jugadores de dicho país. Alguno de ellos con destino directo a la Premier, como Fernandinho o Elano, mientras que Willian recaló en el Chelsea previo paso por el FK Anzhí Majachkalá.
Se convierte en el séptimo brasileño en llegar a Old Trafford y los precedentes no son del todo esperanzadores. La mayoría de ellos llegaron como apuestas de futuro y no consiguieron asentarse como Red Devils, como los casos de Rodrigo Possebon, los gemelos da Silva o Andreas Pereira, que sigue permaneciendo a la entidad tras las cesiones en Granada y en el Valencia CF. Las llegadas de Kleberson y Anderson son un tanto distintas, el primero firmó tras proclamarse campeón del Mundo con Brasil y el segundo siendo pretendido por grandes clubes tras su buen hacer en el Oporto, abonando 30 millones de euros. Sin embargo, ninguno de ellos fue una realidad, por lo que Fred debe superar este hándicap.
A sus 25 años, parece haber llegado a la madurez adecuada para afrontar un reto de esta magnitud. En su primera etapa en el Shakhtar, el mito rumano Mircea Lucescu, lo fichó como mediapunta pero lo recicló como mediocentro asociativo, con gran llegada. Paulo Fonseca lo pulió y lo elevó a otro escalafón, convirtiéndolo en un centrocampista total, gran despliegue físico, pudiendo mostrar su talento. En el 4-2-3-1 habitual del luso ocupaba un puesto en el doble pivote, siendo normalmente Taras Stepanenko su compañero y el más defensivo de los dos. Su misión consistía en ser el enganche y dar libertades en zonas ofensivas a sus compatriotas Marlos, Taison, Bernard y Facundo Ferreyra en punta.
Este esquema lo ha utilizado Mourinho en alguna ocasión, pero de forma habitual y en los partidos más importantes se ha erigido por el 4-3-3. En este esquema con Nemanja Matic como mediocentro defensivo, Paul Pogba en el interior derecho, quedaría el opuesto libre para que se prodigara Fred. Estamos de acuerdo, que es un centrocampista que abarca mucho terreno y que le gusta asomarse al balcón del área, pero debe mostrar su mejor versión defensiva y no exponerse a contraataques, para ser un habitual en los onces del técnico de Setúbal. El 4-2-3-1 podría utilizarse en contextos más defensivos, con Matic escorado a la izquierda al ser zurdo y Fred a la derecha limitando su faceta ofensiva, en pos de un Pogba situado en la zona del 10, con menos obligaciones y centrado en desplegar su potencial en los últimos metros.
El minero llega para estabilizar una demarcación que ha tenido varios protagonistas durante el curso. Marouane Fellaini, siempre ha estado cuestionado dadas sus limitaciones técnicas y se prevé su marcha cuando finalice el contrato en unas semanas. El escocés de 21 años Scott McTominay, ha realizado un gran pape, pero está verde para afrontar un desafío de tal calibre. Ander Herrera no ha tenido una relación idílica con Mourinho, jugando de inicio únicamente en 13 ocasiones. Fred tiene por delante los retos de apuntalar una zona mermada en los últimos años y de ser el primer brasileño en triunfar en Old Trafford.
1 Trackback / Pingback